El Bar - Restaurante Carrales se encuentra al lado de la carretera N632. Sus especialidades son la caza, el cabrito guisado y los platos típicos de la zona.
En la página de gastronomía de La Nueva España podemos encontrar esta receta de Isabel Corripio Llera.
En la página de gastronomía de La Nueva España podemos encontrar esta receta de Isabel Corripio Llera.
Paletilla de cordero:
Ingredientes para 4 personas:
- 4 paletillas medianas o 3 paletillas de cordero recental (unos 2 kg. aproximadamente)
- 3 cebollas
- 1 pimiento verde y 1 pimiento rojo
- 4 dientes de ajo.
- 1 chorro de whisky
- 1 chorro de brandy
- Perejil
- Aceite
- Sal
Elaboración:
Se salan las paletillas, previamente partidas en trozos grandes, y se doran en una sartén con aceite hasta que ofrezcan un color dorado. Se sacan, escurren y pasan a una cacerola. Entre tanto, se pican la cebolla y los pimientos en trozos muy menudos. Se machacan en un mortero el ajo, el perejil y un poco de sal (recuérdese que el cordero se saló ya un poco) y junto con el picado de cebolla y pimientos va todo a la cacerola. Se baña el conjunto con un chorro de whisky y de brandy; se añade (si fuere preciso) un poco de agua o de caldo y se cuece mansamente hasta que la carne esté blanda. Aparte se fríen unas patatas, de grosor mediano para acompañar al cordero en el momento del servicio. Se ofrecerá en fuente de barro, bien caliente, decorado con tiras anchas de pimientos rojos asados. Si se desea puede complementarse con una ensalada de lechuga, tomate y cebolleta.
Se salan las paletillas, previamente partidas en trozos grandes, y se doran en una sartén con aceite hasta que ofrezcan un color dorado. Se sacan, escurren y pasan a una cacerola. Entre tanto, se pican la cebolla y los pimientos en trozos muy menudos. Se machacan en un mortero el ajo, el perejil y un poco de sal (recuérdese que el cordero se saló ya un poco) y junto con el picado de cebolla y pimientos va todo a la cacerola. Se baña el conjunto con un chorro de whisky y de brandy; se añade (si fuere preciso) un poco de agua o de caldo y se cuece mansamente hasta que la carne esté blanda. Aparte se fríen unas patatas, de grosor mediano para acompañar al cordero en el momento del servicio. Se ofrecerá en fuente de barro, bien caliente, decorado con tiras anchas de pimientos rojos asados. Si se desea puede complementarse con una ensalada de lechuga, tomate y cebolleta.
Nota: El tamaño de recental (cordero de unos 8 kilogramos entero a la canal) es el más adecuado para esta preparación. Evidentemente, tiene otra calidad el lechazo y su preparación seguiría otro proceso de asado. Hay quienes gustan de aromatizar los asados de cordero con un suave toque de orégano; en este caso no es necesario, si bien cada cual lo hará según sus gustos. El punto de asado ha de ser tal que la pieza quede muy jugosa y bien cocida. El "pasarse" dejaría la carne muy seca (fibrosa) y el "no llegar" la presentaría un pelín cruda. Cuídese este detalle.
5 comentarios:
Me gustaba cuando era bar (cutrón-cutrón) con ultramarinos... tenía mucho encanto!!
(He cambiado de dirección www.maripuchi.es)
Un besote, Ana
Delante de ese bar, cuando había una panda que separaba el camino de la carretera, he comido kilos de pipas, viendo pasar los coches y haciendo risas con mis amigos...
En el camino había una bolera, que se armaba en las fiestas del pueblo... yo no digo como Maripuchi que me gustara más como estaba antes, ahora se ve muy bonito... me gustaba el encanto de tener 20 años y conocer cada piedra del camino.
Por cierto, en esa panda había un tocón de chopo que daba unas setas espectaculares. Buenas tortillitas he comido yo...
Enhorabuena Maripuchi por el estreno de dominio.
Blanca, esa panda tenía historia, siempre había gente ahí sentada.
Carrales?? creo que es el sitio en el que mejor se come de toda la zona...no paro de recomendarlo a tooodo el mundo, y de momento la gente repite y repite...por algo será!!!
Isabel es una pedazo de cocinera!!!
Comprendo que los vecinos de Caravia Baja recuerden el antiguo bar de Carrales y añoren las horas pasadas en el pardón. Yo lo recuerdo de los domingos por la tarde, cuado iba con mamá a visitar a la tía Emilia.
Quiero desde aquí, "puxar" por las cocineras, en especial por Isabel -siempre con una sonrisa-, sin olvidar a Juani, Miguelín y al resto del personal
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